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Al querer comprar colchones de muelles, puedes encontrarte con la sorpresa de que hay varios tipos. Que sí con hilo continuo, de Bonell, embolsados, lo cual puede resultar bastante confuso para un comprador principiante en el mundo del descanso.
Encontrar diversos tipos sólo significa la posibilidad de encontrar productos con características diferenciadas, gracias a sus propiedades únicas. No obstante, sabemos que quieres comprar el mejor de todos para que tu y tu familia duerman como nunca.
Así que hoy te contamos todo sobre los tipos de muelles, si vale la pena preocuparse por diferencias, que beneficios ofrecen, cuál conviene más, entre otros detalles importantes. Por eso no busques más, en Como Un Tronco te ayudamos a resolver tus dudas.
Para comprender mejor sobre cada tipo y si realmente existe alguna diferencia entre cada cuerpo de colchón, hay que ir desde el principio ¿qué implica la estructura de muelles?
En el colchón de muelles, se presenta un núcleo de este mismo material que conforma una estructura, también se le denomina “resortes”. Están fabricados con alambres hechos de acero o hierro más que todo, que suelen tener una medida de unos 2 cm.
En conjunto, se ofrece una carcasa con tanto número de muelles como desee el fabricante, por lo que puede variar.
En la estructura del colchón de muelles se suele presentar un contorno que favorece el mantenimiento de la misma. Este se elabora con varilla de acero y se presenta en la zona superior e inferior; se integra en ocasiones una costura en los laterales que sustituye el elemento ya indicado.
Ahora, en el colchón de muelles se presentan varias capas, las cuales tienen diversas funciones. Algunas de ellas es evitar que el durmiente sienta los resortes al acostarse, por lo que busca incrementar el confort durante el descanso.
Dependiendo de los colchones y su calidad, puede tener más o menos capas con diversas características que culminan en la tela o funda del producto.
Pero, aunque en líneas generales esta es la estructura que suele tener un colchón de muelles, en el núcleo se pueden conseguir variaciones. Justo por esto, es que hay distintos tipos de muelles, ya que las diferencias en dicho aspecto confieren características y propiedades únicas al momento de descansar.
En pocas palabras, hay distintos colchones de muelles en base a su estructura o forma que ofrecen sensaciones diferenciadas.
Como se ha indicado anteriormente, si quieres encontrar un buen colchón de muelles para tu cama hay varios tipos a conocer. Gracias a las diferencias que presentan en su cuerpo se ha permitido hacer una división acertada en esta categoría.
De esa manera, con cada tipo se asegura una experiencia totalmente distinta que va desde el precio hasta el descanso en sí. Se diferencian en la estructura que presentan en su núcleo y se pueden dividir en tres grandes grupos que son: de hilo continuo, bicónicos y muelles ensacados.
La estructura en este tipo de colchón de muelles es básicamente como su nombre lo indica la continuidad de un único hilo hecho de acero. ¿Cómo puede tan sólo este elemento dar la consistencia al producto? El mencionado hilo se presenta en forma de “Z” y recorre en base a dicha figura toda la zona.
El diseño de hilo continuo en los muelles permite evitar los huecos vacíos en el colchón, gracias a la densidad del material. Por lo que, la superficie de este tipo ofrece una mejor consistencia y sustentación al durmiente
Debido a que su fabricación resulta más práctica suele ser más barata su creación que la de muelles ensacados, por ejemplo. Por ese mismo motivo, la adaptabilidad de estos modelos es menor a otros tipos; es recomendable comprar uno de hilo continuo que se combine con materiales que compensen esta carencia.
Los muelles de hilo continuo permiten tener una mayor durabilidad del colchón y disfrutar del descanso aun en pareja, al ofrecer independencia de lechos. Para su uso se recomienda optar por el uso de canapé, base tapizada o somier de láminas.
Conocidos como colchones de muelles Bonell o bicónicos, se trata de modelos que tienen un aspecto de reloj de arena, ya que al ir llegando al centro se estrechan. Para la estructura de este núcleo se emplean hilos de acero que se encargan de mantener junta la carcasa.
Igual que el tipo anterior, es un diseño fácil de hacer por lo que su fabricación resulta barata. Respecto a la firmeza obtenida es alta, pero puede ir disminuyendo en un periodo relativamente corto en comparación a otros tipos de muelles.
Por lo tanto, se trata de un producto que tiene una vida útil menor y para evitar esta pronta pérdida, se recomienda comprar un producto de muelles bicónicos que tenga alambre templado de gran grosor.
En caso de que se haya seleccionado un colchón con dicho elemento recomendado, se mejora la firmeza de los muelles y la flexibilidad. No obstante, esta última característica es un beneficio que con el tiempo supone una desventaja del producto, ya que, facilita el hundimiento del cuerpo del producto.
Otro aspecto a considerar, es la transferencia de movimiento que se presenta en el colchón de muelles Bonell. Por lo que, si duermes en pareja el descanso puede ser menos grato al sentir cómo tu lado “tira” cuando el acompañante cambia de posición.
Debido a su facilidad en la fabricación y menor tiempo de vida útil los colchones de muelles bicónicos suelen ser los más baratos dentro de esta categoría. Sin embargo, si se quiere algo muy accesible elegir un modelo con alambres de buen espesor puede ser una inversión temporal mientras se disfruta de la garantía.
Denominado como colchón de muelles ensacados, embolsado, Marshall o encapsulado, se trata de un tipo que presenta cientos de estos elementos empaquetados individualmente en pequeños sacos.
Dichos sacos son ubicados por todo el núcleo del colchón y se alinean estratégicamente, todo esto para evitar que se rocen entre sí. Esta pequeña, pero gran diferencia en su estructura, ayuda a que se consigan diversas características positivas en el colchón de muelles ensacado. Vale destacar que debido a estos detalles resulta un producto más complejo en su fabricación en comparación a los otros tipos y por ende, más caro.
La independencia de los muelles ensacados permite que la transferencia de movimientos sea evitada. Por lo tanto, la experiencia de las personas al dormir en compañía con estos colchones es más grata al no perturbar el sueño de la pareja al cambiar de posición.
Adicionalmente, se consigue el disfrute de hasta 7 zonas de confort con los productos de muelles ensacados. Son silenciosos, cóm odos y con una larga vida útil debido a que tiene una mayor resistencia. La adaptabilidad y una firmeza media son otras características destacables.
Seguramente, al indagar sobre los muelles ensacados has encontrado algún modelo de “micromuelles ensacados”. Lo cual, puede hacer que surja la interrogante sobre qué diferencia puede hacer comprar uno u otro.
Comenzando por la estructura, se tiene que los micromuelles conforman una carcasa igual al de los muelles ensacados. Por lo tanto, se presentan en sacos pequeños e individuales que siguen conservando las ya conocidas y apreciadas propiedades de estos modelos.
Ahora, la diferencia entre ambos está en el tamaño y por eso el término “micro” en el nombre. Estos tienen un diámetro menor que suele ser de 2 cm y como consecuencia, en la estructura de este tipos de muelles los sacos para empaquetar son más pequeños.
Respecto a los beneficios a obtener al usar un colchón de micromuelles, está el incremento en la adaptabilidad. Al tener un menor tamaño, se consigue un mayor efecto en ese sentido que a su vez optimiza el confort de los durmientes.
Por estos motivos, incluso se consigue a veces en ciertos productos con muelles ensacados que se combinan con una capa de estos micromuelles.
No hay mejor forma de definir cual es mejor entre los tipos de muelles que haciendo una comparativa. Porque esto permite detectar fortalezas y debilidades que puede tener cada uno.
Por supuesto, esto no quiere decir que si se consigue un colchón de muelles del mejor tipo se tenga asegurado un descanso reconfortante. Hay que recordar que depende este resultado de otros detalles como la calidad, el cuerpo completo del modelo, con que se combina sí espuma u otro material, entre otros detalles.
Pero, más allá de irnos a estas especificaciones sobre la particularidad de cada colchón de muelles, vamos a repasar lo que ofrecen los tipos de muelles en el producto:
Como ha quedado en evidencia, los colchones de muelles ensacados superan a los otros tipos debido a que tiene una proporción más favorecedora respecto a ventajas – desventajas.
La posibilidad de disfrutar de un buen descanso a solas o en pareja hace que haya una mayor amplitud de personas que puedan optar por su uso. Una oportunidad que se mejora al considerar que los muelles ensacados suelen ofrecer una buena transpiración para un dormir más fresco.
Tampoco hay que preocuparse al moverse porque el ruido del colchón perturbe al otro durmiente. Con un modelo de muelles ensacados se consigue evitar la transferencia de movimiento y ser silencioso al cambiar de posición.
Por lo tanto, para las personas que disponen de un presupuesto flexible, invertir en un modelo con estructura de muelle embolsado es una buena idea. Porque si bien el coste es mayor en comparación a los otros tipos de muelles, resulta el disfrute de un producto de calidad a largo plazo que ofrece beneficios para la salud.
Ahora que ha quedado claro que el modelo con muelles ensacados es posiblemente la mejor opción del mercado en dicha categoría, se podría pensar que está todo resuelto para hacer la compra.
Sin embargo, es una idea bastante alejada de la realidad, porque saber que se prefiere un producto de muelles ensacados es apenas uno de los puntos a considerar.
Te ayudamos a dormir...