Menú
Cuando llegan los días fríos una manta eléctrica es de los mejores aliados para tu descanso por la noche o una siesta en el sofá. Aunque, la efectividad de su uso dependerá de la elección de un modelo de calidad y ajustado a ti.
Pensado en ello te traemos una lista de las mejores mantas eléctricas para que encuentres tu opción ideal para acompañarte en las noches más frías.
Manta Eléctrica Pekatherm UP205
Manta Eléctrica Mobiclinic
Manta Eléctrica Sinnlein
Manta eléctrica Cosi Home
Manta eléctrica Medisana HU 674
Comodidad: no es secreto que a veces las parejas se componen de un friolero y un caluroso, algo que genera un problema en ocasiones al dormir. Pero, con esta manta eléctrica nunca se pierde la comodidad, porque cada lado se calienta ajustado a la necesidad de cada durmiente… una excelente ventaja.
Manipulación: muy fácil de programar para colocar la temperatura acorde a tu preferencia, cada durmiente con su propio mando.
Seguridad: no tienes que preocuparte por sobrecalentamiento, la manta eléctrica tiene sistema autostop.
Durabilidad: cuenta con una fabricación con materiales de calidad que prometen una larga vida útil.
Temperatura: me ha gustado que toda la manta se mantiene caliente y logra hacerlo rápidamente.
La medida de esta manta eléctrica es de 140 x 160 cm que te permite dormir a gusto de forma individual. Para que te sientas más cómodo el modelo cuenta con 2 niveles de temperatura a escoger, aunque debo decir que es una cantidad bastante limitada.
La potencia es de 2x60w y mediante sus dos reguladores te permitirá estar más calientito en noches frías, para hacer mejor la experiencia esta confeccionado en poliéster. No es el más agradable, pero cumple su función en cuanto temperatura se trata, para disfrutar sus ventajas coloca el producto sobre el colchón (debajo de la bajera).
Para que sea un descanso cómodo y además, seguro, cuenta con doble fusible térmico, un cable calefactor que tiene un doble bobinado y un sistema de desconexión automático en caso de algún inconveniente.
Cómo último detalle, el modelo de manta eléctrica no tiene reguladores separables, por lo tanto se recomienda el lavado a mano y no a máquina. Las mantas eléctricas Paketherm las podrás conseguir en el mercado por unos 41 euros aproximadamente.
Comodidad: ideal para tomar una siesta en el sofá en un día frío con su suavidad, me ha gustado mucho el confort al tacto.
Manipulación: es bastante sencillo de usar, una ventaja para usuarios de la tercera edad. Incluso la pantalla LED de estas mantas eléctricas nos informa sobre el nivel de temperatura.
Seguridad: con esta manta eléctrica podrás dormir tranquilo al tener protección de sobrecalentamiento. Gracias a su sensor eléctrico, que se activa apenas se enciende la manta, se cuenta con el apagado automático.
Durabilidad: hecha con materiales de calidad y cuenta con un buen acabado para una buena durabilidad, según nuestros expertos.
Temperatura: es agradable el calor que aporta la manta eléctrica, pero para una persona friolera puede ser insuficiente aún en su más alto nivel.
La manta eléctrica cuesta 58 euros aproximadamente y su tamaño es 160 x 120 cm, está confeccionado con fibras fuertes de gran resistencia. A su vez, tiene un fondo extraíble y apto para lavarse a lavadora.
La potencia es de 100w así que consume poca energía eléctrica, a través de esa potencia ofrece 3 niveles de temperatura con indicador LED. Aunque, como he mencionado, incluso su nivel máximo no es demasiado cálido y puede ser insuficiente para algunas personas.
El apagado automático de esta manta eléctrica se produce a las 3 horas de haber sido encendida para evitar sobrecalentamiento u otros accidentes. Para muchos usuarios una característica oportuna y para otros algo limitada, ya que es cierto que en comparación a otros modelos del mercado, no te da mayores intervalos de apagado.
Comodidad: más allá de su función eléctrica, esta manta ofrece confort a través de su suave tacto.
Manipulación: su ligereza lo hace fácil de mover y manipular durante el descanso, tiene un práctico mecanismo de uso.
Seguridad: previene accidentes con su desconexión automática, pero lo que más me ha gustado es que tiene 9 tiempos a elegir, gracias a su temporizador.
Durabilidad: se trata de un producto con buena relación calidad – precio que promete una larga vida útil.
Temperatura: sus múltiples configuraciones de temperaturas lo hace tan confortable y cálido como prefieras. Aunque, tiene unos 30 cm sin resistencia en los laterales, un punto a mejorar.
Es una manta eléctrica fabricada con vellón suave al tacto, puedes conseguir varios colores, como antracita, burdeos, marrón y beige. Respecto al tamaño, tiene 3 tamaños disponibles y su precio está en unos 65 euros en la dimensión 180 x 130 cm.
Para su uso la manta eléctrica se debe colocar sobre el colchón directo para poner encima la bajera y el edredón que funcione como aislante y para conservar el calor. Su potencia es de 120w y ofrece hasta 9 niveles de temperatura a elegir para que obtengas justo el calor que necesitas para combatir el clima de la zona donde vives.
Por otro lado, la manta eléctrica ofrece al durmiente 9 ajustes de tiempo para el apagado automático, así puedes seleccionar el que te funcione mejor para que se desconecte automáticamente. Otro detalle que mejora la protección es la posibilidad de lavar la manta eléctrica en la lavadora para evitar síntomas alérgicos por la suciedad y ácaros.
El tamaño del cable es de 2,40 cm de longitud y tiene mandos digitales para su operación, en tamaños dobles viene con dos mandos para que cada persona tenga uno a la mano. De esa manera, cada durmiente puede adaptar su lado de la cama según el calor que requiera o apagarse en caso de que se duerma solo.
Comodidad: tiene doble cara, ambas con una textura suave y agradable. De esa manera, sin importar como la uses te sentirás muy cómodo.
Manipulación: es sencillo usar esta manta eléctrica, es fácil regular el temporizador y la temperatura. Además, al no ser demasiado gruesa se logra mover sin grandes esfuerzos en la cama y el sofá.
Seguridad: el fabricante ha incorporado un temporizador para programar el apagado automático como te resulte más conveniente, un gran detalle.
Durabilidad: nuestros expertos estiman que se podrá disfrutar de la manta eléctrica por un largo tiempo, aunque no resalta entre otros modelos por este detalle.
Temperatura: un punto a favor de las mantas eléctricas es que no tienes que conectarlas para sentir el calor, ya su tejido ofrece esta sensación. Por lo que, sus niveles de temperatura eléctrica son un plus para evitar el uso de la calefacción.
70 euros por una manta eléctrica Cosi Home de 180 x 130 cm disponible en color rosa y gris. Es reversible al tener un lado interno hecho con tela de franela y uno exterior de pelo sintético ultrasuave; no te preocupes por la suciedad que se almacene en el tejido, porque sus cables y el control son extraíbles para poder lavar la manta a máquina.
El modelo ofrece un calefactor en su interior con 9 niveles de temperatura, el cual podrás verificar a través de la pantalla de LED, así conseguirás justo el calor que necesitas. Otro aspecto a personalizar es el tiempo de apagado automático que se ajusta mediante el mismo mando de control, son 9 opciones.
Es una manta eléctrica de buenas dimensiones con un sistema de calefacción de calidad con una eficiente distribución uniforme del calor por toda la superficie.
Comodidad: ciertamente no ofrece la textura más suave de todas, pero a su favor se debe mencionar que los usuarios manifiestan su aporte a la reducción de los dolores de espalda.
Manipulación: a través de su mando se logra operar con facilidad esta manta eléctrica, sencillo y rápido de usar.
Seguridad: el fabricante ha agregado un sistema que con protección contra el sobrecalentamiento al apagar la manta eléctrica automáticamente. Aunque, para algunas personas los tiempos ofrecidos deberían mejorarse.
Durabilidad: los materiales y fabricación de esta manta eléctrica son de buena calidad, aunque no es destacable, sin embargo no evita que se pueda tener un producto duradero.
Temperatura: me ha gustado lo rápido que calienta toda la zona cubierta en la cama, además sus niveles de temperatura permiten el disfrute de una ligera sensación de calor hasta una más acentuada ideal para el friolero.
Por un precio que va alrededor de los 54 euros puedes adquirir esta manta eléctrica cuyo tamaño es de 150 x 180 cm, siendo recomendable su uso en camas de 90 cm de ancho. Para usar el producto y aprovechar su función debes extender y encima colocar la sábana.
Para que el calor sea ajustado a tus necesidades cuenta con 4 niveles de temperatura a escoger. A través del mando a distancia puedes programar cómodamente la manta que en poco tiempo ofrecerá una cálida sensación.
Debo decir que para facilitar la limpieza de las mantas eléctricas el fabricante ha optado por usar un interruptor extraíble, así podrás llevar el producto a la lavadora sin problemas a máximo 30° C.
Pero, no solo ofrece confort e higiene, sino seguridad mediante su sistema de protección contra el sobrecalentamiento. Lo que hace es apagar automáticamente el calientacamas en caso de que se detecte un sobrecalentamiento.
Las mantas eléctricas, también llamadas mantas térmicas, se caracterizan por su diseño que tiene como base una manta habitual en combinación con un calefactor eléctrico colocado en el interior de su estructura. Por esa razón, se consigue mayor calor en para afrontar el invierno y junto a ello, una serie de ventajas para el cuerpo al usarla en sofás o camas, por ejemplo:
Relajación de músculos y tendones.
Desinflamación de articulaciones.
Mitigación del dolor corporal.
Disminución del líquido acumulado en determinada zona del cuerpo.
Mejora del flujo sanguíneo.
Pero, se debe tener en cuenta que para conseguir esas ventajas y evitar accidentes al usar incluso la mejor manta eléctrica, se ha de tomar ciertas medidas. Por ejemplo, las mantas eléctricas siempre deben estar en contacto con piel seca únicamente, así se reduce la posibilidad de sufrir una quemadura en alguna zona del cuerpo por su calefactor.
Si la manta eléctrica tiene alguna señal de deterioro es preferible evitar su uso para no sufrir algún accidente; algunos signos de esto son cables rotos, olores extraños, zonas de tejido quemadas. Así mismo, es mejor no usar en combinación con prendas mojadas o húmedas y/o bolsas de agua caliente.
Por lo general, una manta eléctrica esta en contacto con el cuerpo por varias horas y por eso, hay que colocar especial atención a sus características para obtener confort y seguridad durante el descanso; especialmente esto último para prevenir accidentes en el hogar.
Para prevenir daños al durmiente los fabricantes suelen incorporar sistemas de seguridad en sus mantas eléctricas, por lo general se trata de apagado automático y protección contra el sobrecalentamiento. Básicamente, su función es que la manta eléctrica se apague después de unas horas por sí sola mientras duermes.
Para mayor comodidad del usuario, algunos modelos de mantas optan por agregar un temporizador para seleccionar tiempos de apagado más cortos o extensos, según tus necesidades y preferencias.
Otro detalle es la potencia que suele ser de 60 – 180w que influye en que tan rápido calienta la manta. Pero, para comprobar que tanto se calentará verifica que se reparta la resistencia por toda la superficie, es lo ideal para aprovechar al máximo la potencia.
De igual manera, están los mandos digitales o analógicos que permiten prender/ apagar el modelo, ajustar el temporizador y los niveles de temperatura.
Ahora, al momento de comprar una manta eléctrica pensando en cosas, como el diseño y colores, dependerá del punto de vista de cada persona y la decoración de su hogar. Así como la selección del tamaño según si quieres una para tu cama de matrimonio, individual o el sofá de la casa.
Existen diversos tipos de mantas eléctricas y podríamos dividirlas en 3 tipos según su diferencia en el diseño:
Manta eléctrica: simplemente llamada de esa forma, se trata de un tipo de manta con una resistencia en su interior que se puede usar para cubrirse directamente en invierno.
Calientacamas eléctrico: se denomina así a la que está diseñada para usarse directo sobre el colchón y debajo de la bajera, así se tiene una superficie cálida dónde dormir sin necesidad de recurrir a la calefacción.
Almohadilla eléctrica: de menor dimensión que los modelos comúnes y por lo general, tienen forma rectangular. Entre los tipos de mantas eléctricas, la almohadilla eléctrica está hecha especialmente para cubrir una zona del cuerpo, siendo común su uso en espalda y piernas. Sus ventajas se encuentran en el alivio de dolores corporales a través del calor generado por el calefactor interior.
Veamos algunas preguntas frecuentes sobre las mantas eléctricas:
La función de la manta eléctrica es calentar para ofrecer mayor calor a cierta zona del cuerpo o en la totalidad de la cama antes de ir a esta o mientras dormimos.
Una manta eléctrica gasta poca luz a pesar de que tenga una alta potencia, se estima que en un año consume alrededor de 108 kWh.
Se recomienda limpiar la manta eléctrica únicamente con una baja cantidad de detergente habitual. Siempre procurando no frotar con fuerza, apretar o torcer y dejando secar al aire libre preferiblemente.
El calientacama va entre el colchón y la sábana bajera.
Ten noches más calidas con las mejores mantas eléctricas del mercado, Pekatherm es ideal para parejas y Mobiclinic para piel delicadas. Sinnlein es adecuado para los clientes más exigentes, Cosi Home te ofrece una grata sensación al derecho y al revés.
Pero, si buscas aliviar tus músculos Medisana es conveniente ¿Cuál prefieres? Aprovecha la mejor manta eléctrica con buena relación calidad – precio.
Te ayudamos a dormir...