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Ante lo desagradable que puede resultar consumir pastillas para dormir, el miedo que generan y los compuestos químicos que muchas veces presentan, las gominolas parecen una gran alternativa.
Por eso, hoy vamos a conocer sobre las gominolas para dormir, todo al respecto para que sepas porqué se ha vuelto una opción popular.
Son un tipo de suplemento dietético hecho con ingredientes naturales, cuya finalidad es combatir el insomnio y facilitar el disfrute del sueño reparador. Entre los componentes se suele encontrar extractos vegetales, como la lavanda, camomila y valeriana, pero si hay un ingrediente común es la melatonina.
Incluso en algunas presentaciones se incorpora vitamina B6 en el producto, porque contribuye con la calidad del descanso al disminuir el cansancio. Además, las gominolas para dormir suelen estar exentas de colorantes, edulcorantes, saborizantes, lactosa, gluten o algún conservante artificial.
Sin embargo, aunque carece de ciertos químicos y cuenta con componentes naturales, hay algunas personas que no deben consumir gominolas para dormir. Cómo es el caso de embarazadas o mujeres en periodo de lactancia.
Así mismo, si has recibido la prescripción de un tranquilizante, tampoco resulta conveniente. Por último, una persona que padece de depresión o alguna enfermedad autoinmune no le conviene consumir gominolas para dormir.
La cantidad idónea de gominola de melatonina para dormir es de 1 mg diario, es decir se ha de ingerir una unidad diaria. La indicación general es que se tome 30 minutos antes de ir a la cama, así hay una buena absorción y se aprovecha al máximo los beneficios.
Las gominolas para dormir aportan varias ventajas al durmiente, una de las principales es que, a diferencia de ciertas pastillas y medicamentos para dormir, no causa adicción. Aunque, igual se recomienda a las personas consultar con su médico si se tiene pensado recurrir a su ingesta.
Otro de los beneficios es su fácil y rápida absorción al ser masticable, a diferencia de la competencia cuya presentación es en comprimidos. Incluso su consumo resulta una experiencia agradable porque tiene una textura y sabor que recuerdan a la gominola tradicional.
No se puede negar que los somníferos han ganado una fama negativa, una a la cual la gominola para dormir no está ligada, lo que genera tranquilidad en algunos. Aunque, no quiere decir que sea perfecta, entre sus posibles efectos secundarios están los dolores de cabeza, náuseas y mareos.
No sé trata únicamente de ingerir gominolas para dormir, sino complementar con otras acciones para un mejor resultado. Comienza por cumplir una dieta balanceada que facilite el proceso digestivo y por ende, el descanso. Un detalle que no se suele considerar es que la melatonina, tan útil para mejorar el sueño, también está en algunos alimentos.
Recuerda consumir tu gominola para dormir una media hora antes de acostarte, respetando la dosis diaria recomendada. Una ingesta superior a lo ideal puede causar efectos adversos, además consumir esto cada noche tampoco es lo más aconsejable porque puede alterar el biorritmo natural.
Realiza ejercicios físicos para que contribuyan con la absorción de la melatonina, aunque debes evitar hacer actividad física extenuante tres horas antes de dormir. Lo aconsejable es establecer una rutina para dormir que sea relajante y facilite conciliar el sueño.
Por supuesto, es difícil dormir bien con un equipo de descanso inadecuado, ya sea por la baja calidad o porque no corresponde con tus características. Así que procura usar una cama, colchón, almohada, ropa de cama y hasta pijama que te resulte cómoda. En el mercado, podrás conseguir varias marcas y modelos de estos productos para que favorezcan tu sueño reparador.
Las gominolas para dormir son una versión más natural, agradable en el consumo y efectiva, que resulta ideal para muchas personas. Sin embargo, siempre la recomendación es consultar a un especialista sobre su ingesta, a pesar de que no genera adicción y tiene pocos efectos secundarios, para que haga la orientación necesaria.
Te ayudamos a dormir...