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Si bien requiere de tiempo y paciencia el poder eliminar la trocanteritis, dormir de forma adecuada va a contribuir a su pronta mejoría. Por eso es necesario realizar algunos cambios en el día a día y durante las horas de sueño.
Conoce las mejores posturas para dormir con trocanteritis y otros detalles que harán la diferencia en el proceso de recuperación.
Evita dormir tumbado en la cama sobre el lado afectado.
Usa almohadas adicionales en el descanso para cuidar la alineación de la columna y las caderas es conveniente para aliviar el dolor en la zona.
Tener un colchón adaptable y una buena almohada de soporte, combinada con una buena higiene en el sueño, ayuda a aliviar síntomas de la patología y prevenirlos.
A este padecimiento se le conoce por varios nombres, todos en referencia al dolor que se presenta en el lado externo de la cadera, entre ellos están:
Trocanteritis.
Bursitis troncantérea.
Inflamación de la bursa.
Específicamente, se trata del dolor presentado a nivel del trocánter, el cual es la parte más prominente del fémur. Es allí donde hay un encuentro de tendones que se cruzan o siguen hasta la pierna, justo en el sitio se produce la bursitis de cadera.
En la actualidad para explicar el desarrollo de esta patología se ha encontrado que puede tener relación con la tendinopatía del glúteo menor y medio. Dicho problema ocasiona que el glúteo tenga dificultades con su capacidad de soportar cargas.
Se cree esto debido a que los tendones del glúteo pasan por encima del trocánter mayor. Por eso, al elevar las piernas hasta un punto medio se produce una fuerza compresiva en la zona, por ejemplo, al tumbarnos de lado o cruzar las piernas.
Hay varias cosas que te pueden llevar a sospechar de que padeces de una trocanteritis, entre ellas el dolor en la cadera al dormir de lado. Se vuelve una situación imposible para el paciente, si tienes trocanteritis derecha tumbarse sobre ese costado y en la trocanteritis izquierda acostarse en ese lado afectado.
En general, las presiones que se generan en el trocánter (“cartuchera”) causan malestar en el paciente. De hecho, es tanto el dolor que llega a ocasionar esa presión en el fémur, que a veces con tan solo subir las escaleras se puede producir molestias.
Pero, hay que tener en cuenta que el dolor no solo se presenta en la trocánter, sino que llega a esparcirse. Muchas personas indican que el malestar se desplaza hasta la rodilla, específicamente por al parte externa de la pierna, lo cual sucede por la irritación de los tendones allí ubicados.
Por esas razones, a veces se confunde el malestar de la bursitis con un ataque de ciática. Los doctores recurren a varios exámenes y métodos para indagar en el caso y tener un diagnóstico más preciso, entre ellos suelen usar la radiografía y la resonancia magnética.
Hay quienes por sus características físicas son más propensas a padecer de trocanteritis por diferentes causas. Entre ellas las mujeres en general al tener caderas más prominentes que acentúan el roce con los tendones y músculos, lo cual a su vez causa la irritación alrededor del trocánter.
Entre otras causas está la ejecución de algunas actividades físicas, quienes hacen ejercicio con intensidad o deportistas, como los corredores, pueden desarrollar bursitis en las caderas. Usualmente esto se debe a la falta de buen estiramiento en las estructuras de la zona o el uso excesivo de estás mismas estructuras por largos periodos que favorecen el constante roce de los tendones y músculos cercanos.
Otras personas más propensas a sufrir de trocanteritis son aquellas que tienen prótesis de cadera. Debido a que se dificulta mantener el mismo nivel de tensión en los músculos y tendones, en caso de incrementarse es cuando aparece el dolor en la bursa.
Pero, hay otros casos propensos también a sufrir de trocanteritis en la cadera. Como aquellas mujeres y hombres con alguna enfermedad reumatoidea o que sufra de dolor lumbar bajo.
Puede que pienses que tener dolor al dormir de lado significa que padeces de trocanteritis definitivamente, pero no necesariamente es así. Lo que si queda claro es que la capacidad del tendón para soportar cargas se reduce, incluyendo las cargas compresivas, por ello acostarse en determinada posición causa dolor en las caderas.
Por supuesto, entre esto destaca el dolor producido al dormir de lado, especialmente si te tumbas sobre el lado afectado, porque el tendón se presiona contra el colchón. A veces, incluso acostarse sobre el lado opuesto a dónde se presenta la bursitis también puede generar dolor, por el peso de la pierna que permanece sobre esta.
Pero, a pesar de cómo suele desarrollarse y actuar el dolor, no siempre se trata de una trocanteritis o tendinopatía glútea, con lo cual también se suele relacionar. Ya que, existen otra serie de posibles causas que pueden conducir a un resultado similar y necesitan de otro tratamiento.
Por eso, lo mejor es acudir con un fisioterapeuta que esté especializado en la cadera. Él será capaz de realizar la evaluación apropiada para dar un correcto diagnóstico y tratamiento para la patología.
Para aliviar los síntomas de esta patología en la cadera es conveniente usar determinada posición en la cama, respetando algunas recomendaciones para evitar incrementar los dolores.
Como el problema está en que los tendones no pueden soportar cargas elevadas, hay que tener cuidado de no exponerlos a ello en exceso durante el descanso en un primer momento. Ya que, la idea es que su exposición ante cargas se dé progresivamente, por eso para comenzar hay que optimizar la forma en que dormimos para tener un buen sueño que contribuya a la recuperación.
Cómo se ha mencionado, dormir de lado puede traer malestar al paciente, pero esto no quiere decir que es una posición que está prohibida. De hecho, dormir lateralmente sobre el lado no afectado puede hacerse mientras se usa un cojín de piernas entre las rodillas, por supuesto si igual sientes malestar cambia de postura.
La siguiente opción es dormir boca arriba, para quienes sufren de trocanteritis suena mejor esta posición, porque se evita de cualquier manera las presiones en los lados de la cadera. Hazlo de la forma habitual e incluye adicionalmente una almohada debajo de las rodillas para favorecer la alineación de columna y cadera.
Hay una alternativa más y es colocarse entre boca abajo y de lado, para ello te tumbas de costado inicialmente. Luego, flexiona un poco la cadera hacia abajo y coloca un cojín debajo de esta para su regulación.
No solo se trata de la postura, a veces el colchón donde duermes también hace la diferencia y en este caso se recomienda usar colchones de menor firmeza. Entre los tipos más recomendados con características apropiadas para los pacientes con trocanteritis está el colchón viscoelástico.
Debido a que la idea es reducir la presión que se genera en la cadera al estar acostado, por eso se recomienda una superficie adaptable. Una propiedad que justamente hace destacar la espuma viscoelástica, porque reacciona ante el calor corporal volviéndose maleable y eliminando los puntos de presión.
Aunque, tampoco se debe abusar de esto, la idea no es usar un colchón demasiado blando. Sino se perderá el soporte que el cuerpo y la cadera necesita para su proceso de recuperación, pero ¿cómo saber cuánto es adecuado?
El peso de la persona juega un papel importante en esto, un usuario delgado no necesitará lo mismo que uno con sobrepeso. Para tener como guía, unos 100 kg de peso corporal requiere de un colchón con un núcleo con material medio – firme a firme (10 cm aprox.) en combinación con uno adaptable, como la viscoelástica ( 4 cm aprox.).
Si tienes trocanteritis, pero ya tienes tu colchón que es algo duro, puedes optar por comprarte un topper. Se trata de un tipo de colchoncillo que es delgado y se coloca sobre el colchón para modificar algunas características a tu favor.
En este caso la recomendación es usar un topper que disminuya la dureza del colchón y aumente la adaptabilidad. Los sobrecolchones de viscoelástica son uno de los mejores en este sentido, te ofrecerá las ventajas del visco a un menor precio.
Por lo tanto, se obtiene un producto adaptable y más suave para reducir la presión en el trocánter y además, ahorras dinero, proteges el colchón y aumentas su vida útil.
Más allá del descanso existen otras cosas por hacer para aliviar los síntomas de la trocanteritis y tener una recuperación más rápida. Lo más esencial es guardar reposo para evitar aumentar la inflamación por la bursitis en la cadera, especialmente en los primeros días de malestar mantén reposo absoluto.
Colocar hielo en la zona afectada puede contribuir a disminuir el dolor, algo temporal, pero efectivo para una sensación calmante en la bursa. Incluso, a veces se usa algún tipo de antiinflamatorio tópico en la zona o en comprimidos para reducir dicho síntoma.
Otro medicamento que se puede llegar a emplear es el anestésico para reducir el dolor de la bursitis, el cual se usa en parche o crema sobre la zona. Y además de las medicinas, hay otros pequeños cambios que pueden ayudar, como usar un calzando blando que permita reducir el impacto producido en la zona afectada.
Ya sea un medicamento u otra medida, siempre el consejo es acudir a consulta médica. De esa manera, se puede determinar mejor la gravedad del caso y lo ideal para su trato, ya que incluso en situaciones más delicadas se llega a indicar asistir a fisioterapia, rehabilitación o hasta necesitar cirugía.
El mantener una postura adecuada es de los principales factores para prevenir los dolores en la cadera y aumentar la calidad de vida. La higiene postural tiene que ver con el momento del descanso e incluso con la posición que mantenemos durante todo el día, ya que es habitual que los usuarios se sienten de forma inadecuada por horas mientras trabajan, por ejemplo.
También se trata de cómo caminamos y por cuánto tiempo lo hacemos, se debe cuidar muy bien el como se ejecuta la marcha con cada movimiento de las piernas y se realiza la pisada. Además, se debe mantener un buen peso corporal acorde al perfil físico del paciente.
Mantener una vida activa y saludable es esencial para reducir las probabilidades de sufrir de trocanteritis en hombres y mujeres. Para esto es ideal para el paciente realizar ejercicio de estiramiento con regularidad y mantener una dieta balanceada con suficiente líquido para proteger los huesos, tendones y músculos.
Sí, lamentablemente, estás atravesando la sintomatología de la trocanteritis, puedes consultar con tu médico que medidas tomar a futuro en tu caso desde su punto de vista profesional para evitar que se repita.
Tener un buen equipo de descanso no solo ayuda a reducir el dolor ocasionado por la bursitis de cadera, sino que también contribuye a prevenir su aparición. Debido a que facilita el tener un buen descanso libre de presiones en dicha región y en general.
Comenzando por hablar del colchón que debe garantizar un óptimo soporte para mantener la columna vertebral correctamente alineada, respetando su curvatura natural. También a su vez debe permitir eliminar los puntos de presión en la cadera y reducirlo en las articulaciones.
Si ya tienes un colchón lo suficientemente adaptable para dormir cómodamente, es necesario complementarlo con una almohada adecuada para asegurar un mejor resultado. Para ello se recomienda usar cojines de soporte que permitan mejorar la postura al ofrecer apoyo para alinear rodillas y caderas.
De nada servirá tener este equipo de descanso adecuado a tu condición, si no lo usas correctamente. Por eso, establece una rutina de sueño que te permita obtener un descanso reparador cada día para cuidar tu salud y prevenir el desarrollo de la trocanteritis e incluso otra enfermedad.
Dormir de lado es posible con trocanteritis si se hace del costado opuesto de la afección y con una almohada adicional, sino puedes simplemente descansar boca arriba. Para un mejor resultado usa un colchón adaptable y menos firme cumpliendo un horario de sueño adecuado.
Asistir con un fisioterapeuta te ayudará a utilizar otras medidas convenientes para tu caso para aliviar los síntomas y saber cómo prevenir su aparición a futuro.
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