Cuando hablamos de la ciática, nos referimos a la serie de síntomas que se presentan por la presión ejercida sobre este nervio. El cuidado de esta condición implica escoger una buena estructura de descanso, un colchón firme, pero confortable para disminuir el malestar. El nervio ciático tiene su origen en la zona lumbar, de ahí se desprende hasta pasar por las nalgas y la parte posterior de las piernas.
Las personas que sufren de la ciática presentan molestias. El nervio se inflama por obstrucción, produce dolores de espalda intensos y repentinos en la parte inferior de la columna, entumecimiento y dolor en las caderas, nalgas o piernas. Las causas por las que se afecta este nervio son muy variadas, pero los cuidados y forma de prevención implican cuidar la zona aún a la hora de descanso, por lo que es necesario contar con un buen colchón.
Teniendo en cuenta que una de las razones por las que se producen las molestias de la ciática es la presión en la raíz del nervio ciático. Es preciso que en todo momento la persona adopte posturas que permitan que haya una distribución adecuada del peso del cuerpo, para tratar de disminuir la presión que causa el dolor lumbar o en las piernas.
Esta consideración incluye los momentos de sueño, ya que durante la noche el cuerpo reposa por al menos 6 u 8 horas sobre un colchón. Por lo tanto, es recomendable tener un colchón que permita una distribución equilibrada del peso, lo que se logra comprando un modelo que tenga una buena firmeza y flexibilidad.
La firmeza es la característica del colchón que permite que la columna vertebral se mantenga en su posición natural, sin deformaciones por hundimientos. La columna en su posición anatómica normal durante las horas de sueño reduce las probabilidades de padecer algún dolor de espalda o molestia durante el día.
Mientras tanto, la flexibilidad del colchón es la que va a permitir que cada parte del cuerpo tenga la movilidad que requiere. Por ejemplo, en las zonas más pronunciadas no se sentirá presión extra o incomodidad. Cuando hablamos de problemas en la ciática, esta característica es súper importante porque precisamente la cadera es una de las zonas más pronunciadas.
Los materiales más comunes del mercado de colchones tienen propiedades particulares. Algunos de estos pueden ser más recomendables que otros para ayudar en los problemas de espalda. Te explicamos las propiedades que aportan los materiales más usados y la característica que más debes cuidar al momento de elegir un colchón si tienes problemas de ciática.
Este es uno de nuestros materiales favoritos porque aporta gran adaptabilidad. Sin embargo, se debe tener cuidado cuando está presente en un colchón que se quiere para alguien con problemas de ciática. Pues, aunque estamos buscando confort, el material visco puede ser muy suave y disminuir los niveles de firmeza del colchón. Por eso, no se recomienda un colchón con una capa Viscoelástica de más de 5 cm de grosor.
El látex es un buen aliado para los problemas de espalda. Suele ser un material confortable, pero al no tener el efecto memoria del visco, asegura la firmeza del colchón. Lo que es importante destacar, es que cuando se trata de látex sintético, este suele mantener olores a plástico por largo tiempo. En este sentido se recomienda comprar colchones de látex con alto porcentaje natural, pues son más saludables, ecológicos y cómodos.
Los muelles son el núcleo ideal cuando queremos firmeza y flexibilidad. La resistencia de los resortes ayudan a mantener una buena firmeza, pero la independencia con que cada uno puede hundirse le aporta flexibilidad para adaptarse a las zonas del cuerpo de mayor volumen y presión.
Esta es la característica más importante y que no se debe perder de vista cuando se va a elegir un colchón. En el caso de los colchones para ciática, lo recomendable es que tengan una firmeza media que garantice estabilidad en la postura de la espalda y flexibilidad para una mejor adaptación y disminución de los puntos de presión.
Elegir el mejor colchón para ciática es solo una de las cosas que se deben hacer para disminuir el malestar que esta provoca.
Los expertos recomiendan que la persona mantenga una buena postura corporal durante el día, que haga ejercicio con regularidad, estiramientos leves, sin forzar la columna vertebral y mantener un ritmo moderado de actividades evitando el peso. Para calmar el dolor de la ciática en el momento, se pueden aplicar compresas frías cada dos horas por un par de días.
Los colchones comunes pueden ser útiles para personas con ciática, siempre que se cuide que estén presentes las propiedades de firmeza y flexibilidad. Por lo general, los colchones de buena calidad trabajan muy bien estas propiedades. En cualquier caso, se recomienda estar atento al colchón donde se duerme, porque podría ser un elemento que potencia las molestias de la ciática.
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