Menú
El colchón es el producto principal para que tengas un descanso reparador. Es más, pasas sobre él varios años, puesto que no solo lo utilizas para dormir, sino para otras actividades recreativas como ver televisión, leer, etc.
Por ello resulta muy importante mantenerlo en las mejores condiciones. Los colchones de látex natural tienen un uso muy extendido por las ventajas que ofrece como confort, ser naturalmente antialérgico, adaptabilidad, etc.
Pero como todo artículo, es susceptible de presentar daños que por no atender a tiempo conllevan a arruinarlo, estando las humedades entre los más frecuentes y perjudiciales.
En Como Un Tronco hemos investigado sobre este tema y aquí te presentamos todo lo que debes saber igualmente cómo puedes prevenir estas humedades y cómo limpiarlas de tu colchón de látex para que te sirva por muchos años.
El núcleo de tipo de colchón es elaborado a partir de la savia del árbol hevea brasiliensis conocido popularmente como árbol de caucho. A veces el producto es defectuoso y con el tiempo desprende un líquido por no haber sido bien secado.
Pero la causa más común es el sudor producto de la transpiración nocturna de la persona y si el colchón no tiene una buena ventilación o está en un ambiente húmedo entonces comenzará a acumular humedades que producirán el moho.
Está claro que las humedades en un colchón de látex resultan un síntoma grave, sin embargo, es posible recuperarlo evitando así el moho y los malos olores.
Para ello, lo primero que debes hacer es no sucumbir a la tentación de ponerlo al sol, porque esto haría que se dañara sin remedio.
Después, procede a leer sus instrucciones que te indican cuáles productos no debes usar para su limpieza. Ahora si puedes pensar en eliminar esas humedades y las manchas.
Aunque no hay un método formalmente establecido por los fabricantes para limpiar el moho y eliminar las humedades de tu colchón de látex, existen algunos procedimientos que dan excelentes resultados.
A continuación Como Un Tronco te presenta el mejor de ellos de acuerdo a nuestra experiencia que además no afecta los materiales de que está hecho ni su núcleo de látex.
Este es un hongo que se reproduce por la humedad, por eso es frecuente que aparezca en los colchones que tengan humedades. Su tiempo de aparición es corto por lo general dentro de las 48 horas.
La única forma de detectarlo es a simple vista cuando comienza a aparecer una mancha oscura en la superficie del colchón. Por lo general se acompaña de malos olores aunque estos se deben mayormente al material húmedo del colchón.
El moho perjudica la salud de manera muy notoria. Aunque en realidad, el moho que puedes ver en el colchón no es el causante de estos problemas, sino las esporas que despide y que te resultan indetectables, las cuales por su tamaño penetran fácilmente en el sistema respiratorio.
Entre las patologías que causan o agravan estas esporas están las alergias, asma, etc. Siendo las más afectadas aquellas personas que tienen su sistema inmunológico debilitado, así como bebés, niños, mujeres embarazadas y ancianos.
La transpirabilidad del colchón es la propiedad que le permite rechazar la humedad y que lo hace confortable al dormir en él.
Particularmente, los colchones de látex natural requieren tener buenas facilidades para transpirar, puesto que de lo contrario tienden a acumular humedad en su interior. Lo que conlleva a la proliferación del moho.
La humedad, aun antes de la aparición del moho, no sólo es causa de gran incomodidad al dormir, sino que tiende a provocar a agravar ciertas enfermedades en las personas que lo utilizan. A continuación te mencionamos algunas de ellas.
Es bien sabido que las enfermedades de las articulaciones causan más dolores en presencia de la humedad, esto sin tomar en cuenta que las empeora.
Por ello es que la humedad del colchón provoca grandes afectaciones, puesto que llega hasta la superficie del colchón de látex, traspasando las fundas protectoras y ropa de cama afectando los huesos del durmiente.
Esta es una enfermedad respiratoria que hace muy susceptible a las personas que la sufren, a la humedad y otros elementos que producen alergia como las esporas del moho. Todo ello se incrementa al dormir en un colchón de látex húmedo.
Además de las mencionadas, las humedades en el colchón de látex provocan otras afecciones de las vías respiratorias. También en la piel por contacto directo con el moho como reacciones alérgicas, aparición de prurito o llagas, entre otras dependiendo de la edad y condiciones inmunológicas de la persona.
Mantener tu colchón de látex limpio es la mejor forma de detectar humedades y la aparición de moho. Por ello a continuación te damos algunos consejos para la eliminación de las manchas más comunes dependiendo de las características de cada una.
Este tipo de manchas ocurre principalmente por la costumbre de realizar actividades recreativas en la cama como ver TV o leer, entre otras.
Lo ideal es actuar en el mismo momento en que ocurren, limpiando el líquido con un paño limpio antes de que penetre y la mancha la quitas con un paño húmedo con agua y jabón suave. Déjalo actuar durante unos 30 minutos y remueve con otro paño húmedo solo en agua.
Finalmente, deja secar bien, siendo lo ideal que lo hagas ventilando la habitación, con un ventilador o secador con aire frío.
Pero si la mancha tiene tiempo, haz el mismo procedimiento pero con una mezcla de agua y vinagre en partes iguales.
Cuando el colchón de látex es utilizado por personas enfermas con movilidad reducida o niños pequeños, este tipo de manchas son frecuentes.
Si son muy recientes, seca la zona con papel absorbente y cubres la zona con bicarbonato de sodio dejándolo actuar durante unos 10 minutos, esta operación se aconseja realizar por lo menos 3 veces.
En caso de que la mancha persista o que ya tenga mucho tiempo y esté seca, mezcla en 1 litros de agua, una taza de amoniaco con unas 10 gotas de lavavajillas.
Después, humedece un paño en la mezcla y frota muy suavemente en la mancha. Repite hasta que la mancha desaparezca. Por último le pasas un paño humedecido con solo agua.
Deja secar bien. Recuerda efectuar este último procedimiento en una habitación bien ventilada.
Esta es una mancha difícil de eliminar, aunque no imposible. Únicamente debes tener en cuenta que no debes frotarla ni usar agua caliente, porque en ambos casos tiende a penetrar más profundamente en el colchón de látex.
Si es reciente, solamente debes pasar un paño empapado en vinagre blanco dando suaves toques, repitiendo la operación hasta que la mancha desaparezca y luego quitas el vinagre pasando otro paño humedecido en agua.
Si la mancha ya penetró, puedes hacer el mismo procedimiento anterior pero sustituyendo el vinagre por agua oxigenada. Recuerda que debes evitar humedecer el colchón.
Ahora si la sangre está seca nada más debes elaborar una pasta con 50 gr de bicarbonato de sodio, 1 cucharada de sal y 1 cucharada de agua. Después, aplicas esta mezcla sobre toda la mancha y la dejas actuar durante unos 30 minutos.
Finalmente, lo cepillas suavemente y aspirar los residuos. Debes realizar este proceso hasta que la mancha desaparezca. Debes dejar que seque bien por ventilación y nunca exponiéndose a aire caliente o al sol.
A pesar de que ya te hemos indicado cómo lidiar con la humedad y el moho que vienen con ellas en tu colchón de látex, lo mejor es que evites sus causas porque “más vale prevenir que curar”. Por lo que a continuación te damos algunos consejos al respecto.
Los colchones de látex natural aun siendo de calidad, por las características de este material, deben colocarse en bases de cama o somieres de láminas que les permitan transpirar libremente y liberar la humedad de su interior sobre todos las producidas por la transpiración.
Igual sucede con las camas o somieres articulados, sobre todo en aquellos casos donde el usuario permanece mucho tiempo acostado en la misma posición.
Los colchones de látex requieren ser colocados en ambientes bien ventilados o con un bajo nivel de humedad. Esto con el fin de que puedan transpirar adecuadamente y no acumules humedad internamente.
Seguidamente, te damos algunos consejos para el mantenimiento de tu colchón de látex. De esta manera, no sólo lo proteges contra humedades a través de una correcta transpiración, sino que alargas la vida útil de sus materiales.
Para evitar que los colchones de látex acumulen la humedad producida por la sudoración nocturna, es conveniente ventilar diariamente durante unos 10 minutos con las ventanas abiertas, antes de colocar la ropa de cama.
Esta es una de las recomendaciones de los fabricantes de colchones de látex que no solo ayuda a mantener el colchón libre de microorganismos que pudiesen perjudicar eventualmente, sino para una mejor salud del usuario.
Además, también contribuye a mantener las fundas limpias, manteniendo esta costumbre es suficiente lavarlas cada 6 meses para mantener su higiene.
Al colchón de látex debe de dársele vuelta cada 6 meses, de esta forma permites que sus componentes no se coloquen en una posición permanente y que no se deforme por causa de nuestro peso. Por otra parte, evita que las humedades se acumulen.
De igual manera se sugiere que se debe girar a lo largo y a lo ancho, aspirando la parte que estaba en la base de la cama antes de utilizarla, así puedes limpiar todos los elementos que se acumulan y pueden perjudicar tu salud.
Los colchones de látex están entre los más cómodos del mercado, sobre todo los de alta gama de látex natural y que en su construcción se usan materiales naturales. Pero su mayor inconveniente lo representa la humedad y el moho, aunque estas molestias se pueden evitar tomando las precauciones mínimas necesarias.
Además de que en caso de que se te presenten estos problemas, hay varias formas de solucionarlos, aunque debes tener presente de que si los dejas pasar mucho tiempo, a la larga perjudican tu salud y la de los tuyos.
Te ayudamos a dormir...