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Hay una extensa lista de productos para el descanso del bebé, que debemos evaluar para favorecer su desarrollo, y los colchones son una parte esencial de esto. Para ello, hay que informarse sobre qué características tiene un buen producto para la cuna y qué aspectos requieren especial atención.
Por supuesto, como en otros artículos, los colchones tienen varios tipos y en base a esto puede ser mejor una elección que otra. Pero, hay dos opciones que generan curiosidad en los padres: modelos de muelles y látex ¿cuál es mejor?
Hoy revelamos esto y un poco más para que sepas elegir el colchón de cuna correcto para que tu bebé descanse a gusto.
El colchón de cuna interfiere en el desarrollo de los bebés, así que es de gran importancia conseguir un producto de calidad y buena procedencia que ofrezca un descanso óptimo para tu hijo.
Por supuesto, saber elegir el mejor colchón de cuna es la parte complicada y por eso, se podría considerar 3 puntos claves como guía en la compra.
Algo tan básico como las medidas de un colchón juegan un papel fundamental en la selección del modelo correcto. Aunque hay diferentes tamaños de cuna, una estándar es de 120×60 cm lo que facilita el conseguir un producto que se ajuste bien.
Pero, si no es el caso de la cuna de tu bebé no te preocupes, hay diversos tamaños de colchones desde el mini hasta los más grandes. Lo ideal es elegir un colchón que tenga solo unos 4 cm máximo de distancia con el mueble.
Respecto al grosor del colchón de cuna para bebé una medida ideal es entre los 12 y 15 cm. Esa longitud permite que el peso del cuerpo tenga un buen soporte y se evita que el niño pueda trepar por los barrotes al crecer.
La firmeza del colchón es parte del soporte que se le ofrece al bebé en su cuna, cuando se trata de una superficie blanda hay riesgo de que el niño quede atrapado y se asfixie. Mientras que un producto muy firme resulta perjudicial para el reposo de la cabeza, incluso se puede generar plagiocefalia.
Un alto nivel de firmeza en el colchón cuna del bebé también puede propiciar el desarrollo de problemas a nivel respiratorio o incluso que se presente muerte súbita del lactante.
Lo ideal, por lo tanto, es elegir el mejor colchón semi firme para cuna, es decir que tenga una firmeza equilibrada. De esa manera, ni hay riesgo de hundimiento ni hay exceso de presión en el cuerpo del bebé.
Ahora, un colchón cuna con cierta firmeza no quiere decir que sea incómodo, usualmente encontramos en el mercado productos con acolchados que incrementan el confort para el dormir del bebé.
Cuidar de la higiene del producto, es igual a proteger la salud de tu hijo, por eso la compra del mejor colchón transpirable es esencial. Esta propiedad permite que haya una correcta circulación del aire que favorece la limpieza y evita la proliferación de ácaros y otros elementos dañinos en su interior.
Muchas veces en la cuna se fomenta el desarrollo de alergias. Así que, a la hora de elegir el colchón, procura que sea transpirable e hipoalergénico, como los de fibra de coco para mayor seguridad y cuidado de la salud.
Un detalle que contribuye a la higiene del producto es que tenga una funda extraíble, esto facilitará que se limpie y se mantenga pulcro. Además, hay que decantarse por aquellos colchones de cuna para bebés con certificados de calidad que transmiten seguridad.
A la hora de elegir colchones para cuna en el mercado, verás que hay varios tipos creados con la finalidad de propiciar un buen descanso a los bebés. Se diferencian esencialmente en el material y diseño que les confiere varias propiedades.
Un material común para el colchón de cuna es la espuma de poliuretano que ofrece diversas zonas de confort. También, los hay de espuma de alta resiliencia con buena densidad, que es ligera y confortable para el descanso del bebé.
Ten en cuenta que cuando se trata de modelos de espuma, hay que revisar siempre que tenga buena densidad que favorezca la columna vertebral y se evite situaciones como el síndrome de muerte súbita.
Así mismo la viscoelástica de densidad media se suele conseguir para los productos de cuna, aunque este material no es conveniente por su gran adaptabilidad que puede afectar la seguridad de los peques.
Si buscas máxima higiene puedes seleccionar un colchón cuna con fibra de coco que garantice una óptima circulación del aire. Pero, aquí destacamos dos tipos de colchones para bebé como lo son modelos de muelles y látex.
El látex se consigue en su versión sintética y natural, esta última es la recomendada para bebés. Este material ayuda a regular la temperatura corporal y tiene una excelente transpiración para los niños.
Adicionalmente, se trata de un producto que tiene cierta flexibilidad que lo hace adaptable al bebé sin que sea demasiado maleable para evitar algún riesgo para la salud. Los colchones de látex natural para cuna tienen una extensa durabilidad y son libres de elementos tóxicos, por lo que son los preferidos de muchos padres.
Aunque suele ser algo costoso, ten en cuenta que vale la pena al tratarse de un producto más seguro, higiénico y con una larga vida útil para que los bebés los usen por mucho tiempo.
Los colchones con estructuras de muelles siguen vigentes gracias a su evolución, la cual dio paso a la estructura de los muelles ensacados. Se trata de aquellos que presentan cada muelle embolsado individualmente para una mejor adaptabilidad para los niños.
Un colchón de muelle suele ser firme, pero el riesgo que pueda generar tanta dureza se contrarresta con un acolchado que confiera ese equilibrio entre firmeza y confort para el bebé. Este elemento, especialmente en el caso de la superficie, debe tener tejidos orgánicos que sean adecuados para el cuerpo del niño.
Tiene una gran transpirabilidad para mantener una mejor temperatura y resistencia, aunque se debe tener en cuenta que esté hecho con materiales de calidad para poder usar en las cunas.
Uno de los principales problemas que se presentan en los colchones para bebés, es la humedad a causa de líquidos de origen biológico que pueden filtrarse durante el sueño, lo cual genera que se almacenen en las cunas.
Sin embargo, una solución común y simple es usar una funda impermeable en el producto para que se proteja. Ten en cuenta, que este tipo de fundas generan calor y tienes la tarea de lavar constantemente para conservar la higiene.
También, otra opción es usar protectores de celulosa que son impermeables y absorbentes a la vez, lo único es que son para un solo uso, por lo que se debe desechar.
Ahora, si necesitas limpiar el colchón puedes optar por hacer una mezcla de bicarbonato con aceite de árbol de té, la cual tiene propiedades desinfectantes y elimina malos olores, humedad y elementos perjudiciales.
Otro tema común son las manchas, una forma de quitarlas es mezclar agua tibia con uno de estos ingredientes: agua oxigenada, vinagre blanco o detergente. Aplica con un paño y frota suavemente para sacar la suciedad del producto.
Si vas a comprar el colchón para la cuna, asegúrate de que tiene medidas que correspondan con esta. La firmeza debe equilibrarse con el confort para que se genere la comodidad que favorece el descanso. No hay que olvidar revisar que ofrezca buena transpirabilidad para conservar la higiene.
Si tienes dudas sobre qué colchón comprar para el bebé, el modelo de muelles ensacados con un buen acolchado es resistente para disfrutarlo por mucho tiempo. O adquiere uno de látex natural que es libre de sustancias nocivas y transpirable.
De esta forma, una vez que tu bebé tiene su colchón para la cuna recurre a la información y consejos indicados para su cuidado para que lo disfrute por más tiempo.
Siguiente: leer cómo hacer un colchón de cuna.
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